La Policía Nacional entiende que el uso de smartphones y tablets por los menores de edad debería estar regulado por contrato. Es por ello que propone la ‘firma’ de un contrato privado que afectaría a los menores de 13 años con el que se pretendería regular el buen uso de los dispositivos, minimizando los riesgos vinculados. Las cláusulas del contrato recomendado por el Cuerpo Nacional de Policía se caracterizan por estar cargadas de sentido común e inciden en el control parental.
El contrato pretende ser una guía privada y flexible a medida que el niño se vaya haciendo mayor. La consigna es el control parental, no “fiscalizar al menor”. Este es el resumen de las normas que se deben pactar de común acuerdo entre padres e hijos:
— El dispositivo se comprará conjuntamente con el hijo, para que conozca aspectos como la garantía o datos de interés como los accesos de seguridad como el PUK.
— La configuración e instalación de aplicaciones y programas se harán con el niño para que aprenda.
— Los primeros usos se harán monitorizados por el padre.
— El padre instalará los filtros y medidas de control parental oportunos para la edad del chico.
— El niño se comprometerá a usar el dispositivo siguiendo las normas establecidas por sus padres y centro escolar.
— Habrá de adaptarse a los horarios y lugares establecidos para su utilización
— Los códigos de acceso serán conocidos siempre por el progenitor hasta que el niño sea algo más mayor.
— Los padres deben supervisar, no ‘cotillear’ las conversaciones y respetar la privacidad de su hijo.
— La supervisión será más intensa al principio en la medida en que el niño vaya aprendiendo.
— Las redes sociales se permitirán a partir de la edad recomendada, que se encuentra en los 13 años.
— El niño no añadirá a desconocidos o entablará contactos con personas extrañas .
— Si surgen dudas, los padres deben estar a disposición del menor para resolvérselas y si hubiera algún acoso podrían contactar con la Policía.
— El joven no compartirá fotos comprometidas o inapropiadas. Sus padres le explicarán estas cuestiones.
— Se prohibirá expresamente el uso del móvil al irse a la cama.
— El nuevo usuario no usará el dispositivo para insultar o acosar a otros niños.
— No compartirá contenido ofensivo.
— Sus padres le explicarán los riesgos de ciertos juegos y Apps.
— Hay un compromiso de cumplir todas estas cláusulas por parte del joven usuario.
— El niño atenderá a las llamadas de sus padres al móvil.
— Evitará adicciones, en una actitud de “controlar la tecnología”, en lugar de que “la tecnología le controle a él”.