De un tiempo a esta parte la Guardia Civil viene detectando una estafa que se está dando de manera recurrente en personas que se dedican al mundo empresarial o que ofrecen determinados servicios a través de internet. nos referimos a la emisión de cheques falsos, robados o sin fondos.
Cuando hablamos de este tipo de estafa, no nos referimos a la emisión de un cheque bancario por parte de un particular identificado, en el que al ir a hacerlo efectivo carece de fondos en su cuenta. El sistema empleado, y que trae de cabeza a muchos profesionales y particulares, consiste en lo siguiente: el estafador localiza a través de internet un anuncio de una empresa, por ejemplo de hostelería, y contacta con su propietario para realizar una reserva de servicios por un importe elevado, lo que hace que el empresario aparque cualquier recelo ante la perspectiva de realizar un buen negocio. Para abonar la reserva, o el pago de los servicios que se pretenden contratar, el “cliente” envía como pago un cheque bancario. Normalmente esto se realiza desde el extranjero, con un importe muy superior al que se requería como anticipo o fianza.
Cuando el empresario recibe el cheque, se pone en contacto con el cliente, para comunicarle que ha enviado más dinero de la cuenta, a lo que se suele aducir que ha sido por un error de entendimiento a la hora de hacer la reserva. Tras esto y para evitar que supuestamente el banco le cobre dinero por la cancelación del cheque enviado y por la nueva emisión de otro nuevo, el estafador le propone al empresario que le ingrese la diferencia en un número de cuenta que le facilita. Y en el caso de acceder la trampa está cerrada. El empresario, para no perder un negocio que le reportaría unos buenos ingresos, hace efectivo el cheque en su banco, y devuelve el sobrante en el número de cuenta que le han facilitado, o a través de una empresa de envío de dinero al extranjero.
Pasados unos días, la entidad bancaria se pone en contacto con el estafado para comunicarle que la entidad bancaria extranjera les ha comunicado que el cheque es robado, que es falso, que carece de fondos o que no existe el titular de la cuenta, por lo que el empresario debe reintegrar el importe que había hecho efectivo, aunque en ese momento ya ha enviado una parte del mismo al estafador, el cual nunca aparece.
Este tipo de práctica fraudulenta, la venimos detectando en alquileres vacacionales, reservas de gran número de habitaciones en establecimientos hosteleros, o estancias muy prolongadas, paquetes vacacionales, servicios como clases personalizadas de flamenco, guitarra, comidas de empresa, etc…
Ante situaciones de este tipo, o en caso de que crea que está siendo víctima de esta estafa, acuda de inmediato a formular la correspondiente denuncia.